lunes, 18 de agosto de 1997

La Contienda por la Gubernatura

 Pulso Económico


La Contienda por la Gubernatura


Por: Jonathan Heath®


A través de las últimas tres semanas, hemos analizado las características deseadas en cualquier candidato que aspira a ser el próximo Gobernador del Banco de México y cómo califican los primeros cinco candidatos más viables al puesto.  Pudiéramos concluir que cualquiera de los tres Subgobernadores analizados (Francisco Gil Díaz, Jesús Marcos Yacamán y José Sidaoui Dib) podrían ser excelentes Gobernadores.  Los otros dos no califican de igual manera básicamente por no tener una formación de economistas.  Sin embargo, Eduardo Fernández García podría ser un excelente candidato para Subgobernador, ya que traería buena experiencia a la Junta de Gobierno, al igual que un punto de vista adicional de un abogado experto en materias financiera y monetaria.

Antes que nada, ofrezco una disculpa por un error de apreciación que cometí al juzgar que Guillermo Güemes García, el cuarto Subgobernador, no calificaba como candidato, lo cual técnicamente no es correcto.  Había señalado, tal y como dice la Ley Orgánica del Banco de México, que los miembros de la Junta deberán gozar de reconocida competencia en materia monetaria, así como haber ocupado, por lo menos durante cinco años, cargos de alto nivel en el sistema financiero mexicano o en las dependencias, organismos o instituciones que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.  La misma ley establece que puedan existir dos miembros de la Junta de Gobierno que no satisfagan plenamente estos requisitos, siempre y cuando sean profesionales distinguidos en materia económica, financiera o jurídica.  Yo simplemente supuse, sin conocer el curriculum del Sr. Güemes, que él entraba en esta última categoría.

Parece ser que Güemes García, antes de ser uno de los negociadores del Tratado de Libre Comercio, trabajó en uno de los bancos comerciales en un puesto de alto nivel por más de cinco años.  Si este es el caso entonces sí califica.  Sin embargo, aun en el caso de que no lo fuera, Güemes García cumple tres años como Subgobernador al final de este año, por lo que satisface los requisitos legales necesarios para ser Gobernador.

Tengo que admitir que la serie publicada atrajo mucha atención y por lo mismo, recibí una gran cantidad de comentarios y sugerencias.  Recibí muchas propuestas de nombres para incluir en la lista de posibles candidatos.  Entre los que más se mencionan están Sergio Ghigliazza, Jesús Silva Herzog, Santiago Levy, Pedro Aspe, Fernando Solana, Guillermo Ortiz Martínez, Guillermo Güemes García y Agustín Carstens.  Aunque sería interesante analizar a cada una de estas personas, creo que no tienen tantas posibilidades como los cinco primeros y por lo mismo, poco añadiríamos a lo ya expuesto.

Entre las objeciones que más se mencionaron estuvo el requisito de que tenía que ser un economista.  Algunos me señalaron el caso del dirigente del Bundesbank de Alemania, que es periodista.  Sin embargo, nuestro nivel de desarrollo no es el mismo.  Mientras que la política monetaria de Alemania está bien establecida y no necesita revisión alguna, nosotros estamos en una etapa crítica de consolidación de una autonomía que todavía está en pañales.  Existe mucha controversia sobre la política monetaria actual y el rumbo que debería llevar la política cambiaria.  El próximo Gobernador tiene que conocer profundamente las implicaciones de cada régimen y los efectos de las distintas opciones monetarias.  En los próximos años se tomarán algunas decisiones muy complejas y por lo mismo, se necesita tener la formación profesional adecuada.

Es obvio que este requisito limita la posibilidad de candidatos que por lo demás serían excelentes, como Eduardo Fernández, actual Presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).  Sin embargo, a sus 42 años de edad tiene todavía por delante muchas posibilidades, pudiendo mantenerse al frente de la CNBV en un momento en que todavía falta por recuperarse de la crisis bancaria.

Resulta interesante encontrar que algunas personas estuvieron en desacuerdo con el requisito que señalé de tener una formación ortodoxa dentro de las distintas escuelas de pensamiento.  En una democracia es necesario mantener balanzas y contrapesos.  Una política monetaria conservadora debe servir para contrarrestar una política fiscal expansionista.  Esto influye en la confianza del inversionista y contribuye a la creación de más empleos.  Mientras que la responsabilidad del gobierno federal es fomentar el crecimiento económico para crear empleo y ampliar el poder adquisitivo de la población, es la responsabilidad del Banco Central asegurar que estos esfuerzos no se hagan a través de la creación artificial de recursos.

Después de realizar el análisis expuesto y escuchar las distintas opiniones de personas informadas, creo que podemos llegar a las siguientes conclusiones.  El candidato preferido dentro de la gente del propio Banco de México es sin lugar a dudas José Sidaoui, a quien tenemos que colocar definitivamente como el puntero.  Sin embargo, la decisión esta íntimamente ligada al futuro de la política cambiaria del país.  El Presidente tendrá que meditar las diferentes opiniones acerca de qué rumbo debería de llevar y su decisión será sobre quien sería el más capaz de instrumentar la dirección que él juzgue deberá tomar.

Si se piensa que se debe mantener el rumbo actual y consolidar una política de mercado, el candidato idóneo es Francisco Gil.  Es el más monetarista de todos, creyente feroz en las fuerzas de mercado.  Inclusive se sabe que él está a favor de políticas todavía más radicales como podría ser un Consejo Monetario.

Si se quieren realizar adecuaciones a la política actual, pero sin cambiar a grandes rasgos la ortodoxia monetarista, el candidato tendría que ser José Sidaoui.  El es el de mayor confianza del Presidente, tiene todos los conocimientos necesarios y podría empujar los cambios necesarios.  Sin salir de la escuela ortodoxa, es el que podría mostrar mayor flexibilidad.

Si por alguna razón la contienda entre estos dos primeros se pone difícil, entonces podría entrar el candidato de la conciliación que sería Jesús Marcos.  Difícilmente existe otra persona en todo el país que tenga mayores conocimientos y manejo de la política monetaria que él.  Aunque todo parece indicar que él no busca el puesto, tenemos que reconocer que no le falta ningún mérito.

Si se busca un cambio radical, entonces podría ser un candidato de afuera, ya sea el propio Eduardo Fernández o algunos de los caballos negros que mencionamos al principio.  Esto no significa que Fernández García favorezca un rompimiento con el pasado, sino que este cambio buscado por el Presidente sería más fácil de instrumentar con personas distintas a los actuales Subgobernadores, quienes seguramente no estarían de acuerdo.  Sin embargo, todo indica que este no es el caso.

Muchos analistas ya están buscando indicios de quién podría ser, dado que esta designación será clave para anticipar el rumbo de la política cambiaria a partir de 1998, especialmente a raíz de la preocupación creciente por la apreciación continua del tipo de cambio.  Sin lugar a dudas, el mercado va a tomar esta designación como una señal definitiva.

Por lo pronto, insisto en que este es un análisis sin mayores pretensiones.  Es simplemente una reflexión personal.


Bienvenidos comentarios al correo electrónico heath@infosel.net.mx

 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

La Marcha de la Economía

  Pulso Económico La Marcha de la Economía Por: Jonathan Heath ® Las autoridades monetarias han manifestado su preocupación por los efectos ...